¡Hola a todos de nuevo, PulpoManíacos! Ya llevaba un tiempecillo sin presentarme por aquí, así que os pido disculpas por la tardanza. De todas formas he encontrado el motivo perfecto para escribir cuanto antes y así compartirlo con vosotros: el estreno de Los Guardianes del Día.
Como muchos ya sabréis, esta película es la segunda parte de Guardianes de la Noche, el supuesto comienzo de una trilogía épica de terror basada en las novelas homónimas que han batido todos los records en Rusia y que están escritas por Serguei Lukyanenko. Por cierto que la primera novela ha salido ya editada en perfecto castellano aquí en España y que, por supuesto, ya he devorado. Recomiendo a todos su lectura, sobretodo para entender mejor si cabe las películas. De hecho, uno de los problemas que sule tener la gente con estas películas es que no las entiende, y no es que no se puedan comprender por si solas sin ayuda de libros, pero es cierto de que se trata de un lenguaje totalmente distinto al que estamos acostumbrados con el cine más occidental.
Los Guardianes del Día comienza exáctamente donde su predecesora termina, con los tenebrosos que han añadido a sus filas el que podría ser el Otro más poderoso de la tierra para así desequilibrar la balanza a su favor, tras siglos de tregua entre ellos y los luminosos. Por otro lado, los del bando de la luz también descubrieron a una poderosa hechicera que podría ser tan poderosa como el que ahora poseen los tenebrosos, por lo que podría comenzar una guerra de forma inminene en el momento en el que los dos tengan que pelear uno contra el otro. Sólo habría una manera de detener el seguro Apocalipsis, obtener un objeto mágico escondido durente siglos que es capaz de cambiar el curso de los acontecimientos: la tiza del destino. En medio de todo esto está nuestro protagonista, Anton Gorodetsky, un mago de la luz de nivel 3 que a veces duda de las intenciones tanto de los oscuros como de los luminosos, además de que los guerreros más poderosos de ambos bandos son seres amados por él...
La historia se vuelve muy interesante en esta película. No pienso contar nada importante, pero tengo que decir que en esta entrega el argumento se vuelve más coral, con personajes que aparecían brevemente en la primera que ahora se vuelven mucho más relevantes. Cada personaje es ahora una pieza de ajedrez que forma parte de una partida inmensa entre los Señores de la luz y de la oscuridad. Pero lo que destaca en la película es como este juego ideado por los que están más arriba está a merced, no de ideologías o éticas pertenecientes a la luz o a la oscuridad, sino de pasiones entre los que están participando. El amor es el tema principal de la película, del amor al que se llega por nuestras propias decisiones. Y al final será una decisión la que lo cambie todo.
Es cierto que al igual que en Guardianes de la Noche, lo que es la historia no es increiblemente original, pero bajo el prisma del audaz Timur Bekmambetov, la narrativa, el ritmo y los diálogos se tornan llenos de metáforas visuales, montajes muy sensuales (sobretodo muy "táctiles") e incluso, por qué no, idas de olla y locuras de gran calibre. Ésta es la principal razón de que a la gente le cueste mucho pillar de primeras estas películas, ya que en muchos casos se aleja bastante de lo que estamos acostumbrados a ver. Pero ése es también el mayor poder de la película, ya que no estaremos en Nueva York o California, ni siquiera en Paris u otros paisajes urbanitas a los que ya estamos tan acostumbrados, sino que nos transportaremos a Moscú, por sus estaciones de metro y sus casas a medio demoler. La capital rusa está llena de paradojas, es tan brillante como sucia, a la vez moderna y antigua; es normal que sea el escenario perfecto para que luchen las fuerzas de la oscuridad y de la luz. Aunque como el propio Anton dice en la película, existen varios tipos de gris.
En fin, que tras dos visionados de esta película (una en castellano y otra la versión rusa), puedo decir que es una de las películas que más me han gustado este año. Es sólo para paladares extraños, pero para aquellos que sepan saborear todas las tonalidades de dulce y amargo la sabrán apreciar como se merece.
1 comentario:
Qué suerte poder leerte nuevamente y encima ofreciéndonos una grata recomendación. No conocía ni siquiera la primera entrega de este film pero ya mimso la estoy buscando. Saludos!
Publicar un comentario