sábado, agosto 23, 2008

PLUTÓN VERBENERO: LO NUEVO DE ALEX DE LA IGLESIA



Y no, no es una película, si no la primera sit-com de ciencia ficción rodada en España.

¿Qué quieres saber más sobre la que podría ser la más disparatada serie hecha en este país? ¡Pués dale un pellizco abajo!


Álex de la Iglesia es uno de los directores más talentosos y con más personalidad del panorama español. Punto pelota. Quizás a algunos les ofenda esta afirmación tan contundente, ya que también tiene varios detractores y este director no deja indiferente a nadie. Pero lo cierto es que pocos cineastas han puesto tanta carne en el asador y han arriesgado tanto como Álex, por lo que es un referente en la cinematografía española.


Y aún no he podido catar la que ha sido su última película, Los Crímenes de Oxford (¡enmendaré ese error en breve!), pero se veía una clara divergencia respecto a su estilo irónico y cargado de bizárrismo y humor negro, por lo que en parte, echaba de menos la faceta de este director. Con Plutón Verbenero, de la Iglesia vuelve, por así decirlo, a sus orígenes, ya que el tono de la serie guarda muchísimas reminiscencias con la que fue su ópera prima Acción Mutante, una Space Opera cañí a más no poder.



Por eso este Plutón Verbenero merece que le prestmos la atención para que en el día que se estrene, podamos ver el piloto y entonces dictar sentencia. Quoteo su blog de producción:


Este es el blog oficial de la primera sitcom de ciencia ficción que se rueda en este país. Estamos orgullosos de poder ofrecerte en riguroso directo el desarrollo de la misma día a día. Comienzo de rodaje: 23 de Junio. Comienzo de emisión: septiembre 2008. Numero de episodios: 26. duración de los episodios: 35 min. Situaciones francamente bochornosas: 10. Decorados absurdos: 5. Extraterrestres ridículos: 20. Masacres gratuitas con armas de rayos cósmicos: 15. Personajes y tramas totalmente inverosímiles: 354. Situaciones de cariño y ternura familiar: 0. Niños graciosos: 0.


Desde luego esto promete ser, como mínimo, divertido, y además un punto y aparte de la ingente telebasura (o quizás deberíamos empezar a llamarla telemierda) que invade nuestros hogares. Si queréis echar un pequeño vistazo a cómo será la serie, os recomiendo pinchar el Tubo que os ofrezco, pero sobretodo, no dejéis de visitar el blog, que es informativo y tronchante a partes iguales.




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lunes, agosto 18, 2008

REVIEW: EL CABALLERO OSCURO




Ya se ha estrenado. Ya está aquí la que quizás sea la película más esperada del año con el permiso de Indiana Jones. Muchos esperaban algo muy grande de El Caballero Oscuro (o Dark Knight en inglés).


Y Christopher Nolan lo ha hecho.



La historia del personaje de Batman tiene ya muchos años, de hecho su primera aparición data de 1939. Se podría decir que la creación de Bob Kane y Billy Finger (quien no ha comenzado a tener el crédito merecido hasta hace muy poco) ya está en plena tercera edad. Tras una juventud alegre y en muchas ocasiones estrambótica y una madurez más oscura y a veces autoparódica, ahora Batman, en sus 69 años, vive un segundo renacer.


Como en el cómic que redefinió los propios cimientos del personaje, El Regreso del Caballero Oscuro de Frank Miller allá por finales de los 80, Batman es un anciano que vuelve a la acción más fuerte y convencido que nunca porque el mundo lo necesita como nunca lo ha necesitado. No, la película de Nolan no tiene para nada este argumento, no me refiero a eso, si no al propio personaje, que como ya he comentado ha vivido por muchísimas etapas, algunas más fieles a sus raíces y personalidad que otras. Y ninguna película ni serie ni ningún otro medio audiovisual ha tratado al hombre murciélago de una forma tan soberbia como este Caballero Oscuro.


Hay mucha oscuridad, y no hablo de Gotham, si no del mundo que nos rodea en la actualidad. Si esta película ha conseguido adelantar en la taquilla estadounidense a la luminosa La Guerra de las Galaxias (la segunda más taquillera para ellos después de Titanic) es porque el mundo ha cambiado mucho en los últimos 30 años. La gente ya no quiere ver cine que le caliente los corazones, si no que busca lo que también encuentra en su realidad: tinieblas, personajes moralmente ambiguos, ciencia sustituyendo a la fantasía, finales trágicos, muerte. Personalmente, no creo que sea la solución al problema, y me parece detestable cuando la gente se pronuncia diciendo lo buena que es una película porque simplemente hayan muertes y termine mal, mientras que cualquier otra película si es esperanzadora y feliz es empalagosa carroña infantil.


Pero ya digo que este Caballero Oscuro de Nolan es algo completamente diferente. De alguna forma, el director de Memento ha sido capaz de unir en una trama nada sencilla un montón de personajes que se debaten entre qué es lo correcto y qué no lo es, entre el bien y el mal, con una estructura más cercana al Padrino de Coppola de lo que me podía imaginar, pero también con su propia personalidad. Y lo cierto es que hay matices de gris como nunca los ha habido en una película de superhéroes. De hecho, voy a dejar de hablar de El Caballero Oscuro como si fuera una película de superhéroes, porque realmente va más allá. Quizás no sea tan espectacular como Iron Man (aunque esto es bastante cuestionable ) o tan fantásticamente naif como Spider-man, pero Batman es más contundente que el cabeza de metal y tan humano como el lanzarredes, pero a diferencia de estos dos también forma parte de las sombras de este mundo. Por ello, lo más importante es sin duda es que Batman siempre ha sido un icono, un símbolo atemporal que estaba por encima de cualquier época real, pero que como todo héroe legendario se convierte en protagonista de los tiempos que corren, siendo un testigo de nuestro tiempo y definiéndonos a nosotros mismos desde lo más profundo.


Nolan ha cogido todos los ingredientes que necesitaba para dar forma a esta película y los usa bien. Vemos desde alusiones claras al 11-S hasta simplemente un retrato del terrorismo más visceral y que más tememos aunque pocas o ninguna vez se haya hecho algo parecido. También somos testigos de la caída de alguien bueno para convertirse en algo peor de lo que él mismo intentaba erradicar. Y cómo siempre queda algo bueno dentro de los seres humanos, por mucho que haya individuos que quieran demostrar lo contrario. Y al final, el sacrificio que sólo pueden llegar a hacer esas personas que llegan a más, que están por encima del resto, precisamente por llevar a cabo esta acción a favor del resto, eliminando su ego. Hay muchos temas y subtemas en este film, pero no quiero hablar de todos, y menos de la historia, porque aunque hace casi una semana que se estrenó, sé que hay gente que aún no la ha visto, y hay que descubrirlo por uno mismo y dejarse sorprender y emocionar por todo lo que el director y compañía tienen guardado en la manga.


La historia que cuanta El Caballero Oscuro es complementada magistralmente por cada una de las interpretaciones que conforman el film. Christian Bale ya era un gran actor de por sí, desde que nos sorprendió a todos siendo niño en aquella pequeña gran película que es El Imperio del Sol, pero en esta película demuestra que el Guardián de Gotham siempre ha estado ahí, esperándole para la que es la mejor caracterización que ha tenido el personaje en sus 69 años de vida. Morgan Freeman y Michael Cane llenan la pantalla de carisma, no creo que haya una sola persona a la que no le encanten sus personajes. Maggie Gyllenhal hace un estupendo trabajo sustituyendo a la actual mujer de Tomito Cruise, y su subida de importancia en la trama ayuda a que el espectador conecte mejor con ella. Y el resto…Oh, el resto… Me los dejaba para el final. Gary Oldman y Aaron Eckhart son simplemente colosales, realmente bordan sus papeles y los convierten en algo mucho mejor de lo que había visto en otras representaciones de sus personajes, el comisario Gordon y Harvey Dent. Y es que estos dos personajes son tan cruciales en la existencia del cruzado de la capa, que lo complementan y lo redefinen, como muy acertadamente se puede ver en la película, donde la confianza y la justicia se entremezclan y a veces se confunden, dando lugar a hechos dramáticos que acaban bien por un lado y mucho peor por el otro.


El Joker interpretado por el tristemente (y después de ver la película sólo puede decir egoístamente que triste es poco) fallecido Heath Ledger es para echarle de comer aparte. No me gusta ensalzar a figuras por el mero hecho de que hayan muerto, y me gusta menos subirme al tren de la moda de los que tienen una opinión exaltada simplemente porque lo han visto en los medios de comunicación. Pero es que el Joker es más de lo que me esperaba, mucho más. Y no quiero quitarle mérito a Heath por lo maravilloso de su interpretación y la forma en que ha redefinido el personaje, pero este crédito también se lo merecen los hermanos Nolan por el increíble guión que han parido. Cada acción, cada frase, cada tick del payaso sicótico se queda grabado en nuestras retinas y en nuestras mentes de forma que el que pensaba que no se podía superar a Jack Nicholson en Batman de Tim Burton está muy, pero que muy equivocado. No me extrañaría que en el propio cómic el Joker se adaptara para ser más como éste, ya que aunque hay historias en las que ha sido más o menos demente (a destacar La Broma Asesina de Alan Moore), nunca lo había visto tan visceralmente caótico como en esta película. Realmente la interpretación de Heath llega a ser hipnótica y absorbe toda la atención del personal como un agujero negro.


Ya digo que cada momento es redondo en esta película, desde las localizaciones hasta las escenas de acción, con el siempre espectacular batmóbil y la nueva batpod. Mención especial también merece la banda sonora compuesta de nuevo por Hans Zimmer y James Newton Howard. Quienes pensábamos que el tema principal de Danny Elfman para las películas de Burton eran inmejorables y que definían la parte épica y tétrica del Señor de la Noche, tenemos que reconocer que la música compuesta por este tándem de maestros se ajusta tan bien al personaje que posiblemente olvidemos la de Elfman. Puede tratarse sin problemas de la mejor BSO de Zimmer, es así de buena.


El Caballero Oscuro es un animal distinto de la ya fantástica Batman Begins. No parece exactamente una continuación y la sensación, aunque parecida, es distinta al ver esta película; realmente su escala es abrumadora. Christopher Nolan ha creado una película que ha superado la gigantesca anticipación que había por el film y ha creado una obra maestra. La película dará que hablar durante años y se analizará hasta el último fotograma de su metraje, pero ahora la mayoría nos preguntamos cómo serán las siguientes películas de adaptaciones de cómics y cómo puede Nolan darnos más si finalmente hace una tercera. Me muero de impaciencia.

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domingo, agosto 17, 2008

BATMAN + SNOOP DOG = BATRAP



No he podido evitarlo...





Robado de entrecomics

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BATMÓVIL+TRANSFORMERS = ?



¿Cómo puedo hacer que vuestra impaciencia disminuya un poco hasta que saque el review de El Caballero Oscuro?

Pues simplemente viendo esta curiosidad.


Un fan tanto del Batman según la visión de Christopher Nolan como de los Transformers que aparecen en la película de Michael Bay, ha decidido realizar una ilustración fanart de lo más trabajada que he visto en mucho tiempo. Seguro que desde que muchos vimos los increibles efectos especiales de los robots realizados por la ILM soñábamos con cómo sería cada vehículo si fuese uno de los androides protagonistas. Pero este artista no se ha quedado en lo obvio pensando cómo sería un SLR McLaren o un Audi A5, si no que ha cogido el ya famoso Tumbler (o Acróbata o simplemente Batmóvil)como modelo para cruzarlo con un benévolo Autobot.

¿El resultado? Pues se puede ver a simple vista, aunque si queréis también podéis pinchar en la foto para verlo a una resolución mayor. Desde luego tiene su trabajo.







Hala, ahora sólo os queda morderos un poquito las uñas hasta que escriba el review, aunque lo mejor que podéis hacer hasta que lo postee es ir a ver la película una y otra vez.

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ESPECIAL OLIMPIADAS DE PEKIN 2008




Si, PulpoManíacos, ya sé que este Blog no trata precisamente sobre el mundo del deporte ni pretendo cambiarlo de repente.

Es sólo que el mundillo que tanto amamos en PasionPulp parece también haberse contaminado por el espíritu olímpico. O más bien, diría que contagiado por todo lo que rodea a las actuales Olimpiadas celebradas en Pekín (o Beijing, como queráis).

Por eso, y porque llevo un tiempecillo sin actualizar, os dedico este macropost con todo lo influenciado por estas olimpiadas y la moda china en lo que lleva de verano: doble review peliculero, animación y spots variados.

¡Ni se os ocurra perdéroslo!



La Momia: La Tumba del Emperador Dragón






El primer review que voy a hacer es precisamente la última película que he visto, la tercera entrega de La Momia (si no incluimos al Rey Escorpión, claro). Esta vez Stephen Sommers sólo produce la película, ya que se encuentra en pleno proceso de producción de la adaptación de G.I.Joe como muchos sabéis, así que el director escogido para devolver a la familia O’Connell a su lucha contra los no-muertos es Rob Cohen.

Lo cierto es que la película estaba rodeada de escepticismo, ya que después del relativo éxito comercial de la segunda parte y su posterior linchamiento, el mundo creía que otra entrega de esta franquicia de aventuras era totalmente innecesaria. Por ello, lo primero que hizo la Universal para no desviarse de lo que había tenido éxito en las primeras entregas, se aseguró de amarrar bien a Brendam Fraser para calzarse de nuevo las botas de Rick O’Connell, aunque el problema era que había que encontrar una idea distinta pero afín al espíritu de la saga. Así que, ¿por qué no cambiar las momias egipcias por los soldados de terracota chinos?

Sí, a la Universal se le escapó Rachel Weisz, pero no iba a quedarse sin actores estelares, así que contrató a los maestros de artes marciales Jet Li y Michelle Yeoh, para los papeles del malo y de la ayudante buena respectivamente, así como traer de vuelta a John Hannah en el papel del “jarjarbinks-esco” hermano de Evey.

¿Cuál es el resultado entonces de tal mezcla en manos de Cohen? Pues una cinta entretenida, con sus momentos de humor y acción bastante conseguidos, pero que no llega a trascender más allá. Ya desde el comienzo, en el prólogo del estilo al que nos tenía acostumbrados las anteriores películas, se pueden ver ciertas carencias. Aparte de ser menos espectacular de lo que Sommers era capaz de mostrarnos, era un pelín demasiado largo y lleno de explicaciones para una película que se centra exclusivamente en la diversión sin ir más allá, por lo que uno puede caer en el aburrimiento. Además, el aspecto no pinta demasiado bien en este fragmento del film, ya que la fotografía y la ambientación se acercan peligrosamente al de una TV movie del montón.

Pero una vez que la cosa arranca y nos ponen a todos los personajes en la palestra, hay que decir que la película se sostiene bien y entretiene. Curiosamente, me sentí como los protagonistas, el matrimonio O’Connel, que está soporíferamente aburrido hasta el momento en el que el gobierno les pide que entren en acción para llevar una reliquia hasta el corazón de la china de finales de los 40. Y aquí, por supuesto, es cuando empieza la acción sin frenos y el festín de efectos especiales, encontrándonos con todos esos elementos que deseamos ver en este tipo de películas: templos y tumbas repletas de riquezas y trampas a partes iguales, no muertos con superpoderes que buscan aún más poder, monstruos mitológicos, personajes tramposos, personajes locos,… Todos entran en el puchero en mayor o menor medida como ingredientes básicos.

Todo esto suena muy bien, pero la historia realmente gira en torno a las relaciones del triángulo Padre-Madre-Hijo, destacando claramente la vertiente paterno-filial, ya que el personaje de Evey ha sido disminuido en sus dosis para esta película por razones obvias, ya que Rachel Weisz fue sustituida por Maria Bello. Y sí, se nota muchísimo esta sustitución y La Tumba del Emperador Dragón se resiente por ello, ya que no existe el mismo tipo de química entre Rick y Evey que había antes. Aparte de esto, parece mentira que los guionistas de esta película hayan sido Alfred Gough y Miles Millar, responsables de la serie Smallville y del guión cinematográfico de Spider-man 2; la historia es demasiado simplista y repite como si fueran ecos situaciones que ya habíamos visto no sólo una vez, si no dos, y eso si no contamos referencias a otras películas que no pertenecen a la franquicia. Y luego están las eternas preguntas sin responder, como de dónde salen, no uno, si no tres yetis que son aliados de la hija del personaje de Yeoh o por qué Jet Li se convierte precisamente en un dragón de tres cabezas (otro enigama con el número 3), así como de dónde sale y quién vive en Shangri La. Después del extenso prólogo, no hubiera estado mal atar mejor la mitología de la película explicando un poquito. Al final estas cosas no entorpecen la película en absoluto, y uno se autoconvence de sólo son excusas para hacer avanzar la trama; pero si se hubiera tratado con más mimo, hubiese enganchado más al espectador.

La música también ayuda a que no nos sintamos muy dentro de la película, ya que es la tercera película y tercer compositor nuevo que entra en el equipo, por lo que no hay una unidad temática como en la mayoría de trilogías y sagas que nos haga sentirnos como “en casa”. Para este cometido se contrató a Randy Edelman tras Alan Silvestri (en la segunda) y el fallecido Jerry Goldsmith (que compuso una banda sonora sobresaliente para la primera), y pese a ser un compositor que ha creado temas divertidísimos y de enorme belleza (todo el mundo ha escuchado y soltado una lagrimita con el tema de Dragon Herat), en esta Momia se le oye de lo menos inspirado.

Con todo esto, creo que Rob Cohen ha hecho un trabajo decente con esta película, y resulta menos chocante que la trama “me lo saco todo de la manga” que tanto afectó a la segunda, lo que la hace bastante disfrutable. Aunque también pierde ese aire esperpéntico y lleno de extravagancias típicas de Sommers y que al menos daban ese toque distintivo. Si os gusta el tema y los personajes, no saldréis decepcionados, pero id a verla pensando que es mero entretenimiento palomitero, y ni siquiera del mejorcito, sobretodo cuando hay otras películas en la cartelera más interesantes.









Kung Fu Panda





Dreamworks Animation también se ha unido a la “fiebre amarilla” de este año y apunta a toda la familia con un film basado en películas de artes marciales con un Panda gracioso y gordinflón como protagonista.

La productora de animación de Spielberg y compañía surgió hace unos años dedicada a competir con un estilo diferente lo que la todo poderosa Disney sacaba a los cines, y tras unos cuantos experimentos en 2 y 3 dimensiones, fue capaz de adelantarse a su nivel con Shrek, una película redonda en todos los sentidos y caló profundamente en el público. Sabiendo esto, Dreamworks no ha tenido tantas grandes películas como ha tenido el rey de la animación en estos momentos que es Pixar, debido a la poca originalidad de algunos de sus guiones y el excesivo peso que descansaba sobre los nombres famosos que ponían voces a los personajes. Hormigaz realmente daba esperanzas de que el tandem PDI/Dreamworks fuera a más y realmente culminó en Shrek, pero tras una divertidísima segunda parte del ogro verde solo fue seguida de tropiezos como el Espantatiburones (cuyos fallos sólo se podían superar con los desastrosos doblajes que la productora escogía en este país) y la pesada y repetitiva Shrek Tercero, haciendo que el personaje deje de ser divertido. Luego hay una película más que decente entre medias que es Over the Hedge, pero que no tenía la agudeza que caracterizaba la película de Shrek.

Pero anunciaron Kung Fu Panda, y el trailer por un lado me parecía más de lo mismo y por otro daba impresión de que podía ser algo prometedor. Mientras que la voz de Jack Black me rechinaba, el estupendo trabajo de color y diseño parecían llevar la animación de Dreamwoks a un nuevo nivel. Gracias a dios que fui a verla.

La película comienza con un pequeño prólogo realizado en dos dimensiones con una animación y estilo tremendos; una hipérbole que te hace sonreír y soltar un chorro de adrenalina antes de que empiece la trama principal. Este par de minutos está tan bien realizado que ya vale la pena el haber pagado la entrada. Pero lo mejor es que la película se mantiene y avanza a muy buen ritmo, de forma que el espectador se mete en la historia antes de darse cuenta. La historia en sí es muy, muy sencilla, pero está plagada de referencias (y no de las descaradas) al cine de artes marciales en general y a muchos cuentos zen que añaden “algo más” a lo que podría ser un film infantil más. Kung Fu Sión, Matrix y Kill Bill son algunas de las películas más modernas que me vienen a la mente cuando veía este Kung Fu Panda.

Los personajes son más o menos arquetípicos, sobre todo los Cinco Furiosos, que funcionan más bien como un solo personaje, y el malvado Tai Lung no deja de ser el típico discípulo furioso que busca más poder, pero hay que decir que los protagonistas, los dos pandas (uno normal y otro rojo) Po y el Maestro Shi Fu son una delicia cuando interactúan y se desarrollan. Mención especial para el Maestro Oogwai interpretado por Randal Dae Kim, que no sólo está especialmente bien diseñado y animado, si no que su carácter se come la pantalla cuando aparece, soltando frases que a más de uno le harán pensar durante un rato cuando salgan de la sala.

El guión, sencillo pero afilado, está además bien sazonado de escenas de acción con un soberbio Kung Fu, como no podía ser de otra manera. Lo bueno de este tipo de animación es que no necesita ser muy realista y puede exagerar cualquier tipo de acción para conseguir coreografías imposibles incluso en manos (y pies) de maestros como Jet Li o Jackie Chan. El escape de Tai Lung de la prisión y su posterior batalla con los Cinco Furiosos en el puente son de lo más impresionantes. Desde luego los animadores de PDI y Dreamworks se merecen el debido reconocimiento por esta película.

Aunque el sentido del humor sea más o menos infantil e ingenuo en esta película, realmente recomiendo el visionado para aquellos que amen la animación y quieran ver algo de calidad, así como a personas que simplemente quieran pasar un rato entretenido. Dreamworks vuelve a subir el listón.





Y ahora que os habéis leído de arriba abajo este par de reviews peliculeros, os dejo con un par de vídeos más que curiosos relacionados con las Olimpiadas de Pekín.


En primer lugar, y ya que venimos de hablar de Kung Fu Panda, os voy a poner un pequeño montaje promocional animado que los británicos emiten en su televisión con motivo de los Juegos. Está realizado por los creadores del grupo musical Gorillaz, Damon Albarn y Jamie Hewlett, y en este caso han cogido uno de los cuentos más famosos de la cultura china, Viaje al Oeste, en el que se cuentan las peripecias del Rey Mono y sus amigos. Historia por cierto en la que se basa el manga más famoso de todos los tiempos, Dragon Ball. La música y la animación son especialmente hermosas, así que espero que os guste.








Otro spot animado, pero en este caso de un corte totalmente distinto al anterior. Parece que esta vez se han basado en la reciente película de Transformers dirigida por Michael Bay. El resultado es espectacular. ¿No os parecen formas cybertronianas los robots que aparecen?






Con esto, os dejo hasta los siguientes reviews, ¡que todavía me dejo alguno en el candelero!

¡A disfrutar y animar mucho a vuestros respectivos países para conseguir el oro!

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