lunes, abril 20, 2009

REVIEW: DRAGONBALL EVOLUTION





Mucho llevamos hablando de esta Dragonball Evolution en este humilde blog. Que si será una bazofia, que si tiene cosas clavadas al manga, que si es imposible de adaptar… Pero el momento ha llegado y la película ya se ha estrenado en los cines de casi todo el mundo.


¿Nuestro veredicto? Pellizca en el link.



Dragonball, quizás el manga más conocido de todos los tiempos. Normalmente, cuando una licencia logra las cotas de éxito que posee la obra de Akira Toriyama, las adaptaciones a otros medios no se hacen esperar mucho. Serie de animación, videojuegos, figuras y hasta multitud de parodias se han hecho y siguen haciéndose de esta popular historia que este año cumple la friolera de 25 años.


¿Y qué pasa con la adaptación cinematográfica? Bueno, como muchos ya sabéis, los chinos no tuvieron que esperar un cuarto de siglo para hacer sus correspondientes visiones del mito, llegando a producir dos cintas. Pero han tenido que pasar todos esos años para que el manga se hiciera famoso en todo occidente, y los americanos de la Fox llevaban bastante tiempo con las licencias compradas como para no usarlas. Fue entonces cuando un millón de voces de los fans gritaron al mismo tiempo…


El hijo de Tom Cruise en La Guerra de los Mundos, Spike de Buffy Cazavampiros como un Piccolo blancuzco, Chow Yun Fat como el Duende Tortuga… A cada elección de casting que se anunciaba, los fans se tiraban más de los pelos. Ni siquiera se leyeron muchos posts de alivio cuando Stephen Chow se autoproclamó como productor. Y los trailers, como casi siempre, una de cal y otra de arena, ya que por supuesto sabíamos que no podía trasladarse 100% el carácter de la obra original a la nueva película. ¿O sí podía? Lo cierto es que después de haberla visto, aún sigo cuestionándome algunas cosas…


¿Cuál es el tema central de la primera parte de la obra de Toriyama? Podría decir sin dudarlo mucho que el viaje del héroe, su maduración y autodescubrimiento a la vez que explora un mundo nuevo para él, poblado de personajes que se van uniendo en su aventura. Bueno, pues la película también trata sobre esto. Y es que cuando salí del cine me di cuenta de la gran cantidad de elementos que la obra original y esta nueva adaptación tenían en común: Goku sigue siendo un poco bobo, sólo que ahora es caracterizado como el “rarito” del instituto en lugar del arquetipo de Mowgli, Bulma busca las Bolas de Dragón con un motivo totalmente egocéntrico pero inofensivo y Yamcha no sigue sirviendo para mucho excepto para echarles una manilla a los héroes en un momento determinado. Y esto no es todo lo que la película tiene que ofrecer, ya que también está cargada de un buen sentido del humor, que por lo menos a mí me hizo soltar una sonora carcajada en partes como la de Goku intentando peinarse o la de Bulma cuando descubre las revistas “guarras” de Muten Roshi.


El sentido del humor del que hablaba se suma a la sensación de aventura, muy del estilo de su homónimo manga, sólo que en este caso las cosas tienen que acelerarse un poco. Y gracias quizás a esta “concentración” de la trama, la película no llega a aburrir en ningún momento, ya que todo se cuenta con un buen ritmo. Los personajes entran rápido en escena, y las explicaciones son justas e incluso en muchos casos inconclusas (al igual que en la obra original, todo sea dicho), pero la acción hace que uno no se pierda. Eso sí, personalmente echo de menos ciertas cosas en esta adaptación que quizás para la trama no valen un pimiento, pero que en cuanto a carisma hacía que el manga estuviera a años luz de otras historias. Yo las llamo “las pequeñas excentricidades Toriyama”. No nos vamos a encontrar personajes con cara de perro en esta película, ni siquiera al Rey del Mundo, y por supuesto tampoco vamos a ver dinosaurios por el campo, ni mechas tan al estilo japonés. Cuando uno ve Dragonball sin tener estos elementos, la historia no resulta tan atractiva, y el apartado general pierde.


Y es que cuando uno ve Dragonball Evolution se da cuenta de que ha sido decentemente entretenida, no lo voy a negar, pero al rato uno se pone a pensar en todas las cosas que se podían haber hecho mejor. Y aquí la culpa no va a James Wong, el director, que aunque mediocre hace todo lo que puede; mi dedo apunta hacia la Fox. El gran problema aquí es que parece como si el gran estudio norteamericano nunca hubiese creído en la franquicia que tenía entre las manos, ya que el dinero que se ha invertido en ella es irrisorio. ¿Por qué la Fox no ha hecho como hizo en su día con los X-Men? En lugar de eso, ha optado por hacer como en Alien Vs. Predator 2 y dejarla a su suerte… Esto afecta gravemente en la película, sobretodo en el campo de los efectos especiales y la escala del film, ya que los sets son claramente de cartón piedra (no hay mejor ejemplo que la escena del volcán) y hay enemigos que ni siquiera se ve cuál es su forma, ya que se opta por un montaje rápido para que no se vea lo falsos que son (de nuevo, la escena del volcán). Y podría seguir con cosas como lo poco impresionante que resulta Shen-Ron o cómo Oozaru (el mono gigante) mide dos metros y poco en lugar de seis. Esto es lo más triste de todo, no su distanciamiento en ciertos apartados de la obra original, si no que lo que tiene no posee la suficiente fuerza como para brillar por mérito propio.


Como conclusión, voy a repetir de nuevo que la película, aunque mediocre, me divirtió bastante casi las dos horas que dura el film, y en ningún momento pensé que era la bazofia que muchos pregonaban. Se mantiene algo del espíritu de Dragonball, y para nada se “caga en el nombre de la original”; yo sigo teniendo mis mangas en la estantería y ni han entrado en combustión espontánea ni nada. Si uno es capaz de abstraerse un rato y dejarse llevar por la película, se dará cuenta de que es un film bastante entretenido, con cierto regustillo ochenteno (sí, es más comparable a la peli de Los Masters del Universo que a Super Mario Bros). Tristemente, la historia es muy sencilla, y los elementos que podrían haber sobresalido se quedan en algo cutre, por lo que acaba siendo algo que nadie recordará con el tiempo, al contrario que su tocayo nipón.






1 comentario:

Unknown dijo...

Que sepáis que me ha parecido un comentario muy completo y acertado de la película.

Yo por mi parte disfruté viendo la película, sobretodo por el cachondeo, claro, pero disfruté.

Espero que alla por el mundo más gente con miras amplias y ganas de pasar un rato entretenido en vez de exagerados fanáticos que aúllan a los 4 vientos por la profanación a la obra de Toriyama (¿Que profanación ni que ostias?¡Pero si Toriyama es productor ejecutivo!)